Este es un recorrido por el trabajo más experimental de Soda Stereo, un disco que introdujo a miles de oyentes noventeros el rock sónico.
Se sentía el agotamiento
En enero de 1992, Soda Stereo se presentó en el Estadio Mundialista de Mar del Plata. En este concierto, Gustavo Cerati pronunció una frase que desató los rumores de una posible separación: “Este es el último concierto en mucho tiempo”.
La banda concluyó una larga y agotadora gira mostrando el tema “Canción Animal”. Realizaron catorce funciones en el Teatro Gran Rex y actuaron gratis en el Obelisco frente a 250,000 personas, todo podía pasar.
Proyectos personales
Se sabe que sus miembros estaban trabajando; Zeta Bosio produjo el disco de Los Aguirre, la banda de Marcelo Moura, mientras que Gustavo grabó Colores santos con Daniel Melero y produjo a la banda Los 7 Delfines.
En ese momento, Cerati produjo varias canciones nuevas: “Primavera 0”, “En remolinos” y “Claroscuro”.
Los rumores corrieron durante tres meses hasta que los integrantes se reunieron en abril para ensayar una gira por España sin muchas ganas de querer salir.
De regreso a la Argentina
El hecho de tocar en locales pequeños, donde eran casi desconocidos, les impulsó a seguir haciendo música juntos.
Cuando regresaron a Argentina, dieron vida a Dynamo, un disco que los devolvió a sus raíces, cambió su sonido y ayudó a promover una nueva generación del rock argentino.
El álbum
Este estuvo fuertemente influenciado por bandas de Shoegaze como My Bloody Valentine, Spiritualized o Sonic Youth.
Luego de escuchar a algunas de estas bandas tocar en vivo en Madrid, Cerati quedó impresionado y decidió traer a Argentina el sonido de guitarras ruidosas llenas de efectos.
El sonido de Dynamo también es una extensión lógica del entorno espacial de Colores Santos y, de hecho, Melero también está en producción.
En una entrevista radial, Zeta dijo que estaba celoso del dúo creativo Melero y Cerati, pero, agregó:
“Fuera de los celos, los resultados me parecen muy buenos, el dúo fue muy bueno para Gustavo y para todos, ya que lo que hicimos con Dynamo, definitivamente necesitaba a Colores Santos para que sucediera”
Cambios antes de salir a la luz
Originalmente el disco se llamaba “Gol” hasta que un día estaban hablando de bicicletas en el estudio y Melero preguntó: “¿Recuerdan cuando las bicicletas tenían dínamo?”. De inmediato todo se convirtió en una bronca entre: “¿Alguna vez has tenido dinamo en tu bicicleta?”.
Cerati explica que la palabra no solo les recuerda su infancia, sino que también transmite lo de “Una energía mecánica que sale cuando empujas un instrumento”.
En retrospectiva el sonido único del álbum parece haber sido calculado, pero no fue así, en el momento en que se dispusieron a trabajar en él, fue esa energía de juntarse en el estudio que los temas comenzaron a surgir uno tras otro.
Amistad e innovar
Para Cerati, Soda Stereo siempre giraba en torno a los mismos temas, las mismas preguntas y tocar los mismos instrumentos que tenían a la mano. En este sentido, Dynamo es uno de los trabajos más intensos de la banda, fruto de años e intensas experiencias.
El trío ha intentado incorporar elementos nuevos y diferentes en su sonido, y Dynamo es un álbum que les ofreció mucha libertad.
Ya que mientras en discos anteriores Gustavo cantaba con fuertes gritos, en estos temas ejecuta todo con un tono más suave y relajado, que contrasta con las guitarras estridentes.
Como en el tema “En remolinos” con una batería caótica y guitarras llenas de efectos, pero Cerati ruega con calma: “Déjame vivir este sueño, el mejor sueño que he tenido”.
La fuente de inspiración
Años después en una entrevista con Gustavo, dijo que cuando escribió la canción “En remolinos” se encontraba mal emocionalmente, por lo que trató de crear sentimientos positivos para que dejara de sufrir. En otra nota, diría que la letra refleja la “posibilidad” de soñar con el cielo en medio de una tormenta.
De ese sentimiento surge también “Nuestra fe”, un tema electrónico en cámara lenta, cuya letra compuso en un momento muy sagrado de su vida, mientras sostenía un cristal derecho en la mano.
El momento más emocionante para Dynamo fue la canción “Luna roja”, que Cerati describió como asociada con la alegría, el amor y la aparición del VIH. Para entonces, han pasado cuatro años desde la muerte de Federico Moura, el cantante inmortal de Virus, a causa del sida.
Gustavo dando homenaje a Federico
La amistad entre Soda Stereo y Virus se reconoció desde el principio cuando tocaron en un club nocturno de Buenos Aires.
Para esta canción Gustavo se inspiró en el trabajo que venía haciendo la Fundación Huésped, a la cual donaría los derechos más tarde.
El poder de la buena escritura
Después comentó que se acercaba cada vez más a un paisaje imaginario mientras escribía la letra.
En un momento se le ocurrió algo relacionado con una bandera árabe algo como estar en Túnez. Finalmente, advierte sobre situaciones que pueden hacer que las personas no se cuiden, especialmente en lo que respecta al VIH.
Además, explica que, aunque los considera “Enemigos del amor”, para él este tipo de enfermedades “Refuerza la idea del amor” porque crea conciencia sobre lo importante que es cuidar a los demás y cuidarse a uno mismo.
Nuevos sonidos
En cuanto a la producción, el trío decidió hacer las primeras partes del disco y aprovechar la espontaneidad del momento. Por ejemplo, en el caso de “Sweet sahumerio”, una banda india tocó y brindó instrumentos típicos de su país.
En cuanto a Melero, quien alguna vez colaboró en la letra de Canción animal, esta vez se dedicó a la producción musical, mezclando grabaciones de los ensayos de la banda con samples preprocesados hasta hacerlos irreconocibles.
Así nació el riff original del tema “Ameba”, producto de la melodía “Mass Production” de Iggy Pop y el sonido distorsionado de la guitarra.
Usando los trabajos previos
También utilizaron la experiencia adquirida en Colores santos para integrar los bucles repetitivos. Según Cerati, en muchas canciones se esfuerzan al máximo, haciendo de la repetición la única constante a lo largo del disco, una especie de “Droga musical”.
La masterización estuvo a cargo del técnico estadounidense Arnie Acosta, quien trabajó en los últimos discos de U2.
Los estudios de grabación Argentinos
Para Cerati, las capacidades técnicas de los estudios internacionales superaban a lo que se podía hacer en Argentina.
Según Marcelo Fernández Bitar el biógrafo de Soda Stéreo, lo único que se hacía en estudios argentinos era subir los agudos y así sonar “más brillante”. Por otro lado, el estándar de la industria musical de EE. UU. y Europa proporcionaba una mejor separación estéreo y una mayor intensidad de frecuencia.
Con esto en mente, Cerati, Bosio y el manager Daniel Kon viajaron el 4 de octubre de 1992 para encerrarse en AM Mastering Studios en Los Ángeles durante casi cinco días.
Esto fue fundamental para que el álbum pareciera tranquilo en medio de la tormenta por la que habían pasado los miembros de la banda. Finalmente, Bosio y Kon se hicieron cargo del envío de lo grabado a Sony a Miami.
Más allá de lo ya hecho
En una entrevista reciente, Melero admitió que tanto Colores Santos como Dynamo tenían un “Nivel artístico muy alto” porque querían un sonido que fuera inesperado en términos de la tecnología existente.
El resultado fue tan novedoso que contradijo las expectativas de los ejecutivos de Sony, quienes esperaban algo más parecido a Canción Animal y decidieron que sería su último trabajo con la banda.
Pero con Soda Stereo, el objetivo de Dynamo era destruir lo que crearon en Canción Animal.
Dijo Cerati en una entrevista en esa época:
“La idea era hacer un remix, mezclarlo con algo más bailable e incorporar algo más etéreo a nuestra música”.
El cantante también estaba cansado de la estructura clásica de las canciones, por lo que hacer este disco significa “Modificar” la estructura, cambiando el formato de su composición.
Dynamo dejó en shock a todos
Cuando la banda lanzó Dynamo el 26 de octubre de 1992, la tendencia sónica aún no había llegado a los Estados Unidos, donde aún prevalecía el garage rock. Al respecto, Charlie Alberti recuerda que un año y medio después de su publicación, recibió llamadas de varias emisoras de radio argentina para decirle: “¡Uy! ¡Presentá tal tema que es sónico!”.
Y lo que una vez fue un duro golpe para muchos fanáticos se convirtió en un gran disco de culto para otros, quienes dijeron “¡OK! ¡Este es mi grupo!”
Los videoclips
Los ochenta habían significado el auge del videoclip, el mediometraje y el videoarte. En 1988, Boy Olmi había estrenado “The Man of the Week”, un cortometraje experimental que recorrió el mundo entero y ganó premios en Alemania y Brasil.
Esto mismo le dio un prestigio de nivel internacional, lo que hizo que Kon lo contactara para hacer el videoclip de “Primavera 0”.
El tema había sido elegido por el hecho de ser para Cerati “Una canción de amor que navega entre la calma y la tormenta”, con influencias de My Bloody Valentine.
Una nueva propuesta
El director Olmi se andaba adentraba en el género documental, por lo que decidió hacer una oferta contraria, pidiendo documentar el proceso creativo de la banda.
En ese momento, los miembros de Soda eran muy extravagantes cada vez que aparecían, Olmi dijo en una entrevista: “Quería documentar todo lo contrario, mostrando su vida personal, sus casas, el gimnasio, sus clases de yoga, lo que comían”.
El deseo de mostrarles la realidad llevó a Boy Olmi a renunciar a la luz y trabajar con poco equipo. El resultado final es un corto de 15 minutos que presenta el video musical oficial de la canción. A los participantes les gustó tanto que decidieron contratarlo para la puesta en escena de sus presentaciones en Obras.
Los últimos Shows
Estas apariciones en Obras, el 18 y 19 de diciembre son la culminación de esta sensación de novedad del álbum. No fue para nada sorpresa que los shows hicieran Sold Out, por lo que hubo que agregar fechas extras.
La elección del lugar no fue aleatoria, ya que se cree que un estadio no iba a representar el sonido del álbum, además, el mismo día se daba el show de Serú Girán en el estadio River.
La nueva generación del Rock Argentino
Por otro lado, los integrantes de la banda fueron los responsables de la selección de muchas bandas nuevas en ese momento, como Tía Newton, Resonantes, Martes Menta, Juana la Loca y Babasónicos.
Carca, líder de Tía Newton, admitió años después que “Se arriesgaron y en el apogeo de su popularidad no descansaron en las arenas movedizas de un clásico que se hunde. . .Con este disco, Soda pasó a otra dimensión”.
“Fue el punto de quiebre del rock nacional”, dijo el guitarrista Babasónico, Mariano Roger en la misma entrevista.
Un nuevo comienzo
Y bueno, cuando parecía que todo había terminado con Soda Stereo, apareció Dynamo para cambiar el rumbo de la banda y expandirla hacia nuevos horizontes.
Y eso es exactamente de lo que se trata este álbum: Es un faro de luz para una banda que, gracias a la química y el entusiasmo de sus miembros, ha creado algo completamente revolucionario.
Pero también fue un motor y un refugio seguro para las bandas argentinas que habían roto con lo convencional del rock nacional.
Este es un disco importante para esos momentos en que “La vida te pide ir a un nuevo norte y necesitas la fuerza de un generador/ dínamo para llegar”, como describe Maitena Aboitiz.
Dynamo, en sus doce canciones, llama a la sociedad en su conjunto a pensar en el futuro, incluso en medio de una tormenta.
Es una pieza absolutamente devastadora que incluso después de muchos años, muestra claramente el nivel de sofisticación e innovación que Soda Stereo aportaba a la escena.
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One thought on “Soda Stereo y Dynamo, un disco adelantado a su tiempo”
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