En sus propias palabras
Axl Rose dijo que sintió un odio profundo desde que estaba en el útero de su madre, Sharon Elizabeth Falkenhurst.
Juró que sentía que su padre lo despreciaba y entendió que sería un niño no deseado y su padre biológico, una especie de monstruo.
“Mi padre biológico es una persona bastante loca. No me gustaba la forma en que me trataba a mí y mi madre. Entonces, cuando nací, solo quería que ese bastardo muriera”.
Axl Rose para Rolling Stones en 1992.
Aunque parece que los humanos no pueden conservar los recuerdos de sus días en el vientre materno, el líder de Guns N’ Roses cree en esto y manda a “joderse” a cualquiera en su contra, ya que al someterse a una terapia de regresión, pudo descubrir la historia abusiva de su familia y que suprimió como mecanismo de defensa para sobrevivir.
Para muchos una leyenda viva del rock y uno de los mejores vocalistas en la historia del género, no puede quitarse de encima su reputación como misógino o racista, y ninguno de los problemas que ha causado por su naturaleza impulsiva lo que hizo que saltara del escenario para atacar a un fanático en 1991, o causar un alboroto en todo un estadio en Canadá, en 1992.
Sin embargo, detrás del ego de estrella de rock y las peculiaridades de un artista que ha saboreado la gloria eterna en el escenario, hay una personalidad sensible y frágil que ha “sobrevivido” a una infancia realmente horrible.
Su primer trabajo oficial fue participar en un estudio universitario sobre los efectos del tabaco en el organismo. ¿Su tarea? Fumar.
Rose se involucró en la música de la iglesia, ahí aprendió a tocar el piano. Pero el pastor solo le permitía escuchar canciones de Elvis o góspel porque se decía que otros géneros y artistas vienen del diablo.
A la edad de 19 años, el cantante dejó su familia rota y su natal Indiana, para unirse a Izzy Stradlin y llegar a California para cumplir su sueño de hacerse famoso. Los dos formaron el grupo Hollywood Rose. Pero pronto conocieron a un grupo que también tocaba rock, L.A. Guns, fusionandose en 1985 para formar Guns N’ Roses.
Axl, Slash, Izzy Stradlin, Duff McKagan y Steven Adler pronto firmaron su primer contrato discográfico. La aguda voz de Rose y el poderoso e innovador encanto rockero de la banda les hicieron ganar un brutal número de seguidores, y el primer álbum “Appetite for Destruction” encendió la emoción con éxitos atemporales como Sweet Child O’Mine, Welcome to the Jungle o Paradise City. Tuvieron el mejor debut en la historia del rock hasta la fecha, vendiendo 35.000.000 de copias.
Pero como siempre, hay problemas en el paraíso glorioso.
anécdotas y abusos como todo un Rockstar
En su biografía Watch you bleed: The saga of Guns N’ Roses (2008), Izzy revela que esos años estuvieron plagados de prostitutas, drogas y entre las anécdotas del libro, se revela que los gemidos en “Rocket Queen” (1987) son reales, gracias a una noche apasionada entre Axl Rose y su entonces novia, la stripper Adriana Smith.
Con el guitarrista Slash, tuvieron muchas peleas públicas, tanto es así que en un show, Axl lo acusó de ser adicto a la heroína y prometió dejar el grupo si el problema persistía. Los fans no podían creer lo que escuchaban. Al día siguiente en el concierto, toda la banda apareció excepto Axl. Slash tuvo que disculparse por su adicción y en ese momento Axl subió al escenario para llevar a cabo el espectáculo.
En 1996, después de cinco álbumes, más de 100 millones de copias vendidas e innumerables premios, la banda se disolvió. Slash decide irse, lo que llevó al aparente final de la edad de oro de Guns N ‘Roses.
Sin embargo, los fanáticos no perdieron la esperanza de que la banda se uniera y finalmente, después de 19 años de silencio, se produjo la reconciliación. El cantante dio el primer en paso.
En el escenario
Muchos conciertos y festivales siguieron, el último, “Vive Latino” México en 2020 , cuando estalló la pandemia de COVID-19 que los obligó a dejar de realizar presentaciones y otros proyectos.
Hoy, Axl Rose, de 61 años, sabe que es amado y odiado al mismo tiempo, pero salir del escenario es imposible.
En 2019, reemplazó a Brian Johnson en la gira de ACDC. Porque para él cantar le permite “liberar su energía” y expresarse de la manera que desee. Según su reloj, todavía llegará tarde, pero el espectáculo continuará porque “hay un cierto orgullo en saber que lograste, aquello que viniste a hacer”.
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